Donald Trump aún no ha regresado a la Casa Blanca, pero el CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, afirmó que ya ha observado un cambio significativo entre los líderes de las finanzas tradicionales respecto a su disposición para involucrarse con las criptomonedas.
En las seis semanas posteriores a las elecciones presidenciales de 2024, Ripple, que desarrolla infraestructura blockchain para instituciones financieras, asegura haber firmado más nuevos clientes que en los seis meses anteriores combinados.
En una entrevista con Decrypt, Garlinghouse explicó que muchos de estos nuevos clientes del sector financiero tradicional han manifestado abiertamente que ahora están dispuestos a trabajar con criptomonedas en Estados Unidos porque ya no temen que eso les traiga problemas legales.
2025 is here and the Trump bull market is real. For Ripple, this is even more personal after Gensler's SEC effectively froze our business opportunities here at home for years. The optimism is obvious and very deserved.
— Brad Garlinghouse (@bgarlinghouse) January 5, 2025
Today:
✅75% of Ripple’s open roles are now US-based, while…
“No querían enfrentarse a esa batalla”, comentó Garlinghouse sobre las empresas financieras tradicionales estadounidenses durante la presidencia de Joe Biden. “[Las criptomonedas] eran solo otro dolor de cabeza que no querían manejar”.
Sin embargo, desde las elecciones, Trump no solo ha continuado haciendo promesas relacionadas con los activos digitales, sino que también ha nombrado a una serie de empresarios pro-cripto para ocupar puestos clave en su gabinete, un movimiento que, según Garlinghouse, ha enviado una señal clara a Wall Street.
“Cuando hablas con ellos ahora, ven lo que está por venir”, dijo Garlinghouse sobre los líderes de las finanzas tradicionales. “El riesgo de involucrarse con empresas como Ripple es ahora mucho, mucho menor”.
Que la industria cripto se encuentre en un momento de menor riesgo y mayores oportunidades no es casualidad. El año pasado, Garlinghouse y ejecutivos de otras destacadas empresas cripto estadounidenses ejecutaron una estrategia política sin precedentes, invirtiendo cientos de millones de dólares en súper PACs que moldearon las elecciones de 2024 y aseguraron el futuro político de la industria en Estados Unidos.
Los frutos de esa estrategia ya están impactando las prácticas de contratación y las perspectivas de Ripple. Garlinghouse reveló que actualmente Ripple está contratando para más de 70 nuevos puestos en Estados Unidos, lo que significa que aproximadamente el 75% de las nuevas vacantes de la compañía están basadas en ese país. Esto representa un giro total respecto a los últimos años, cuando la mayoría de las nuevas contrataciones de Ripple se realizaban en el extranjero debido a preocupaciones regulatorias.
“La salud de la industria de los activos digitales no solo se mide por los precios de las criptomonedas”, señaló Garlinghouse. “Se mide por la contratación, por los contratos firmados. Estas son las cosas que impulsan la economía, y ya lo estamos viendo incluso antes de que [Trump] asuma el cargo”.
Aún hay mucho por hacer para la industria una vez que el presidente electo tome posesión el 20 de enero. El mes pasado, Trump prometió crear el primer consejo cripto en la Casa Blanca, un grupo de trabajo liderado por el capitalista de riesgo David Sacks, que asesorará sobre políticas y legislación relacionadas con criptomonedas.
Varios ejecutivos del sector cripto han expresado interés en formar parte de este exclusivo consejo. Al ser consultado sobre si ya había sido invitado a participar, Garlinghouse no confirmó ni negó, pero mencionó que ha estado en contacto con el equipo de transición y está al tanto de los planes que tienen para las políticas cripto en 2025.
“Me siento muy bien y, sinceramente, muy emocionado por lo que he aprendido sobre esos planes”, concluyó.
Vía | El giro de Wall Street hacia las criptomonedas: promesas y oportunidades – Tecnología con Juancho