Desde que nuestro nuevo presidente, Donald Trump, salvó temporalmente a TikTok de una prohibición nacional, los estadounidenses se han preguntado qué empresario con los recursos suficientes dará un paso adelante para comprar la popular plataforma de redes sociales. Ahora tenemos un nuevo candidato: el influencer viral Jimmy Donaldson (también conocido como MrBeast). “Está bien, compraré TikTok para que no lo prohíban”, publicó Donaldson en X la semana pasada. “De manera inesperada, muchos multimillonarios me han contactado desde que tuiteé esto. Veamos si podemos lograrlo”, añadió.
El martes, el abogado de Donaldson comunicó a CNN que la estrella de reality shows estaba seriamente interesada en comprar la plataforma y que ahora forma parte de un grupo de inversionistas estadounidenses que buscan adquirir el sitio. La firma de abogados Paul Hastings, que representa al grupo, declaró que esta oferta responde a la decisión de la Corte Suprema de respaldar una ley que obliga a vender TikTok o enfrentar su prohibición en Estados Unidos.
Tiene mucho sentido que Donaldson, cuya actividad empresarial gira en torno a crear contenido viral y superficial, quiera ser dueño de la plataforma más conocida por distribuir ese tipo de contenido. Comprar TikTok le daría, en esencia, un monopolio del infoentretenimiento, lo que para el influencer más poderoso del mundo sería como ganar la lotería.
La razón por la que estamos en esta situación comenzó el pasado abril, cuando Joe Biden firmó una ley que obligaba a ByteDance, la empresa matriz china de TikTok, a vender la aplicación a una compañía estadounidense o enfrentar su prohibición en todo el país. Analistas han señalado que esto fue un error político, dado lo popular que es TikTok entre los votantes jóvenes. Esta semana, al regresar a la Casa Blanca, Trump aprovechó fácilmente la decisión impopular de Biden. Con una orden ejecutiva, Trump extendió por 75 días el plazo para que ByteDance encuentre un comprador adecuado, siempre y cuando Estados Unidos conserve el 50 % de la propiedad de la plataforma. Trump ya ha dejado claro que estaría abierto a que otras personalidades conocidas compren la plataforma, incluidos multimillonarios como Elon Musk y Larry Ellison.
Sin embargo, hay señales de que Trump podría apoyar el acuerdo de Donaldson. Según Bloomberg, Brad Bondi, hermano de Pam Bondi, la elección de Trump para Fiscal General, representa al grupo de inversionistas detrás de la oferta de Donaldson. Trump y Bondi tienen una relación previa. Bondi formó parte del equipo legal que ayudó a fusionar el tambaleante Trump Media & Technology Group Corp (dueño de Truth Social, la red social de Trump) con una empresa de cheque en blanco en marzo pasado, un acuerdo que muchos consideraron un rescate para Trump en el peor momento de sus problemas legales. Además, Bondi representó a Elon Musk en 2018 cuando el multimillonario fue acusado de fraude de valores por la Comisión de Bolsa y Valores, según reportó The Lever.
Aún no se comprende del todo por qué Estados Unidos ha actuado tan agresivamente para prohibir la red social favorita de sus jóvenes. La narrativa predominante es que los funcionarios estadounidenses están preocupados por los vínculos de la plataforma con China y quieren cortar la conexión con su rival geopolítico. Sin embargo, una teoría alternativa sugiere que TikTok ha sido un canal popular para que activistas pro-palestinos distribuyan evidencia de atrocidades israelíes, lo que ha influido en los jóvenes estadounidenses en contra de su aliado especial en el Medio Oriente. Mitt Romney señaló algo similar el año pasado, al insinuar que la razón detrás del “abrumador apoyo para cerrar” TikTok era la “abrumadora” cantidad de “menciones sobre Palestina, en comparación con otras redes sociales”. Un artículo de opinión en Time también culpó al contenido pro-palestino del aumento de incidentes antisemitas en campus universitarios de Estados Unidos.
Desde que TikTok fue salvado, han circulado rumores de que la plataforma ahora está suprimiendo contenido pro-palestino. Sin embargo, estos rumores pueden estar algo exagerados. Una investigación de 404 Media publicada el miércoles encontró que el sitio no parecía estar consistentemente suprimiendo contenido pro-palestino. La plataforma comunicó a los periodistas que este tipo de contenido no violaba sus términos de servicio.
Si el objetivo de traer TikTok bajo control estadounidense es detener el flujo de contenido pro-palestino hacia audiencias en Estados Unidos, esto tendría precedentes en el comportamiento de otras empresas tecnológicas estadounidenses. Un informe reciente de Human Rights Watch sobre Meta reveló que la compañía ha practicado una “censura sistemática de contenido palestino en Instagram y Facebook”. X y YouTube también han enfrentado controversias relacionadas con contenido sobre Israel y Palestina.
Vía | ¿MrBeast comprará TikTok? La verdad detrás de su sorprendente oferta – Tecnología con Juancho
