Las contraseñas que usamos para acceder a nuestras cuentas en internet están a punto de ser cosa del pasado tal y como las conocemos. Con la vista puesta en mejorar la protección de los datos de sus usuarios, Google ha creado una nueva forma más segura y mucho más cómoda de ingresar en las cuentas personales de sus servicios: las passkeys.
El gigante tecnológico comenzó a probar este método hace unos meses a través de varios usuarios. Un comunicado oficial en su blog, el pasado mes de mayo, dejaba claro el objetivo de Google: sustituir las molestas claves de acceso alfanuméricas -a menudo difíciles de recordar y relativamente fáciles de quebrantar- por un nuevo método basado en sistemas de reconocimiento facial y dactilar.
¿En qué consisten las ‘passkeys’?
Las nuevas passkeys son una alternativa a las contraseñas clásicas, que permiten desbloquear cuentas y dispositivos con una huella digital, un escaneo facial o un número PIN. Estas contraseñas son más fáciles de recordar, más rápidas y lo más importante, más seguras.
Estas claves de acceso son también una opción más cómoda para el usuario, ya que evitan tener que recordar las distintas contraseñas que usa para cada uno de los múltiples servicios de internet a los que estamos dados de alta. Asimismo, ofrecen una mayor protección contra ataques masivos de phishing y los ataques selectivos, superando la seguridad de las contraseñas temporales o de un solo uso o SMS.
Este nuevo método ya se ha introducido en plataformas de uso empresarial como Google Workspace y en Google Cloud, y se espera que llegue muy pronto a los servicios más populares de Google, como el correo electrónico Gmail, el servicio de almacenamiento de archivos Drive o el navegador Chrome.
“Esto significa que la próxima vez que inicies sesión en tu cuenta, comenzarás a ver indicaciones para crear y usar claves de acceso, lo que simplificará tus inicios de sesión futuros”, señala Google, que seguirá admitiendo contraseñas tradicionales por el momento.
Google no ha sido el único en implementar esta novedad. Apple creó su propia passkey con el lanzamiento de iOS 16, permitiendo que sus usuarios utilicen esta tecnología en todas las aplicaciones, incluido Apple Wallet.