Mientras el mundo sigue conmocionado por las fallas informáticas causadas por una actualización defectuosa de la empresa de ciberseguridad CrowdStrike, Bitcoin continúa funcionando normalmente gracias a su naturaleza descentralizada y su independencia de proveedores e infraestructura centralizados.
El jueves por la noche, CrowdStrike desató el caos en el mundo tecnológico cuando numerosos sistemas que usaban sus herramientas de seguridad para Windows dejaron de funcionar. Importantes sistemas, incluyendo oficinas gubernamentales, bancos y aerolíneas, se cayeron y las pantallas mostraban la temida “pantalla azul de la muerte”.
El viernes, CrowdStrike informó que está trabajando con los clientes afectados por un “defecto encontrado en una actualización de contenido para sistemas Windows”. Aclararon que los sistemas Mac y Linux no se vieron afectados, que no se trata de un incidente de seguridad o ciberataque, y que ya identificaron y solucionaron el problema.
El CEO de CrowdStrike, George Kurtz, advirtió sobre posibles intentos de aprovechar esta situación por parte de “adversarios y actores malintencionados”, e instó a todos a mantenerse alerta.
Sin embargo, Bitcoin no se vio afectado porque no depende del software de Microsoft, según explicó Taras Kulyk, fundador y CEO de SunnySide Digital. Kulyk señaló que la tasa de hash de Bitcoin no se vio alterada, ya que la mayoría de los mineros usan sistemas basados en Linux.
Kulyk destacó la ironía de que los bancos a nivel mundial hayan tenido que cerrar debido a este problema, mientras que Bitcoin siguió funcionando sin interrupciones.
El experto explicó que la diferencia entre usar sistemas Microsoft o Linux se relaciona con los principios de privacidad, descentralización y empoderamiento individual frente a la autoridad centralizada. Señaló que los mineros de Bitcoin suelen preferir el código abierto de Linux sobre Windows.
Mientras CrowdStrike revirtió la actualización, las consecuencias del error son extensas. Las acciones de la empresa cayeron un 11.10%.
Por otro lado, la industria blockchain en general no pareció verse afectada por la falla. El mercado de criptomonedas subió un 4.6% ese día, y Bitcoin se cotizaba a $67,224.
Kurtz se comprometió a proporcionar total transparencia sobre lo ocurrido y las medidas que tomarán para evitar que algo así vuelva a suceder.