Boeing, una empresa con sede en Estados Unidos, tiene ambiciosos planes para incursionar en el negocio de los autos voladores en los mercados asiáticos hacia finales de esta década, según el director de tecnología de la compañía, Todd Citron.
Boeing espera que la tecnología de su subsidiaria Wisk Aero ayude a abordar los problemas de tráfico en las ciudades asiáticas.
Hace dos años, Boeing invirtió en la tecnología de Wisk después de apostar 540 millones de dólares en esta startup con sede en Mountain View, California.
Un año después, el gran fabricante de aviones absorbió por completo la empresa y comenzó a supervisar el desarrollo de su tecnología de despegue y aterrizaje verticales (VTOL).
Actualmente, Wisk está trabajando en su sexta generación de aeronaves, que promete transportar hasta cuatro pasajeros y equipaje adicional en cada viaje. El taxi volador utiliza propulsión totalmente eléctrica, convirtiéndolo en una opción respetuosa con el medio ambiente para el transporte aéreo.
Lo destacado de Wisk es su tecnología de vuelo autónomo, algo raro en los taxis voladores y que brinda espacio para un pasajero adicional en la aeronave, ya que no se requiere piloto.
Planes de Boeing en Japón
Aunque la fabricación de Boeing está basada en Estados Unidos, la empresa ha expandido sus operaciones al extranjero durante muchos años. Fuera del territorio continental estadounidense, Boeing tiene seis instalaciones de investigación y desarrollo (I+D) en Australia, Corea del Sur e India.
La compañía estableció una instalación en Japón en 2022. A principios de esta semana, el director de tecnología de Boeing inauguró una instalación dedicada en Nagoya. La ubicación de la instalación tiene sentido logístico, ya que la industria automotriz japonesa se encuentra en la región de Chubu cercana.
Gigantes japoneses como Mitsubishi, Kawasaki y Subaru, con quienes Boeing ya tiene asociaciones de suministro para sus propios aviones, han establecido fábricas en la región. Estas compañías también han desarrollado experiencia en áreas más nuevas de la tecnología automotriz, como vehículos eléctricos y celdas de combustible.
Además de colaborar en la producción, Boeing también busca aprovechar el talento de la región y se está asociando con la Universidad de Nagoya para captar nuevos talentos, según informó Nikkei.
¿Dónde operarán los taxis voladores?
La información sobre los planes para los taxis voladores fue revelada por Citron en una entrevista con la publicación japonesa Nikkei.
Los planes actuales de Boeing para la instalación de Nagoya incluyen desarrollar herramientas digitales para el diseño y fabricación de aeronaves, e investigar materiales compuestos para los cuerpos de las aeronaves.
Además, la empresa busca mejorar su conocimiento sobre combustibles sostenibles e hidrógeno, así como formas de aumentar su capacidad de producción mediante el uso de robots, según agregó el informe de Nikkei.
Esto muestra que la compañía aún se encuentra en las etapas iniciales de sus planes para lanzar los taxis voladores en Japón y está considerando la instalación de Nagoya como un centro de I+D para todas sus operaciones.
Según la entrevista de Citron con Nikkei, Boeing obtendrá primero la certificación para su tecnología de vuelo autónomo en Estados Unidos antes de dirigirse a los mercados asiáticos.
Dada su ventaja tecnológica, tiene más sentido que Boeing trabaje con un proveedor de flotas, al igual que Waymo o Cruise, pero para los cielos. También es posible que la compañía opere la flota por sí misma.
Hay muchas preguntas sin responder sobre qué ciudades está buscando la empresa. Pero en Japón, donde la compañía busca tomar la delantera, la lucha por los taxis aéreos ya se está calentando.
La empresa local SkyDrive y la alemana Volocopter ya están formando fila para brindar servicios de taxis aéreos el próximo año en la Exposición Mundial de Osaka. En comparación, Boeing todavía está en tierra con sus planes.
